Avanza la red de agua en Marisol

El delegado de Marisol, Raúl “Rulo” Bonini, habló sobre el progreso de la red de agua potable y la dinámica de crecimiento de la localidad.

Confirmó que las obras de extensión de la red de agua en el único balneario del distrito continúan desarrollándose a medida que es requerida por la expansión de la construcción en el destino de playa dorreguense, sobre los espacios donde está permitida, a pesar que este año la construcción se ralentizó.

Recientemente, se completaron dos nuevas cuadras específicas: la calle Paraguay, entre Córdoba y Corrientes, y Bolivia, también entre Córdoba y Corrientes. Estas nuevas extensiones se encuentran en la zona cercana al río Quequén Salado, hacia el sector de El Vimar.

En diálogo con La Voz del Pueblo, el funcionario explicó que el proceso de

ampliación de la red responde a la demanda de los frentistas y vecinos. A medida que la gente lo solicita, la obra es autorizada por el Concejo Deliberante, permitiendo así la expansión de la infraestructura.

La red original fue construida por el SPAR (Servicio Provincial de Agua Potable y Saneamiento Rural), la misma que instaló la planta de ósmosis, pero actualmente es el municipio quien se encarga de la ampliación.

Señaló que los beneficiarios de estas nuevas obras son residentes permanentes y propietarios de segundas viviendas. Esta constante expansión de la red de agua, junto con las luminarias, es un claro indicio del crecimiento sostenido de la localidad. Asimismo se solicitan más medidores cada año para las nuevas viviendas, y aunque la extensión de la red de agua es un proceso costoso y lento, avanza anualmente.

Dijo que los servicios están llegando “prácticamente a todas partes” dentro de Marisol que si bien está limitada para construir pero es “bastante amplia” la superficie para hacerlo.

Un Marisol que crece

Como residente de toda la vida de la zona (nacido en Oriente pero conocedor de Marisol desde niño), Bonini admitió que observa un cambio significativo. Explicó que Marisol estuvo “muy muy tranquilo” durante muchos años, pero en los últimos tiempos experimentó un desarrollo “más rápido”. Este crecimiento acelerado lleva impresa una exigencia lógica por parte de los habitantes para que las casas cuenten con los servicios necesarios. “Año a año va apareciendo algo que para el servicio de la gente es bueno”, expresó.

En este contexto de crecimiento, se está discutiendo un Plan de Manejo del Paisaje Protegido de Marisol, y del río Quequén Salado, lo cual es considerado un síntoma del desarrollo turístico de la localidad.

Bonini cree firmemente que este control es “necesario”. Participó en una reunión donde se destacó la importancia de la colaboración ciudadana para mantener y seguir desarrollando el área, procurando conservar el paisaje original.

El objetivo principal es proteger la calidad de la playa, la arena, los médanos y las áreas verdes, evitando la construcción indiscriminada para mantener la limpieza y la particularidad de la costa de Marisol. “Yo creo que es necesario que todo tenga su control”, señaló Bonini.

Asimismo destacó el notable aumento de pescadores que visitan la playa de Marisol, conocida por ser excelente para la es actividad recreativa.

Necesidades y desafíos

Al ser consultado sobre las necesidades más apremiantes de Marisol, Bonini, desde su doble rol de funcionario pero también como vecino, mencionó la importancia de una estación de servicio. Sin embargo explicó que la estacionalidad de la localidad, con una gran afluencia de gente en verano y muy poco movimiento durante el otoño y el invierno, dificulta la inversión en este tipo de servicios. Los turistas, en plena temporada, deben viajar a Oriente o Copetonas para cargar combustible o resolver problemas con neumáticos, ya que los servicios de gomería también son escasos, especialmente en verano.

“Una estación de servicio sería importante, pero lo que pasa es que pasamos de la temporada a tener muchísima gente, a después en el invierno…que no haya movimiento”, planteó.

A pesar de estas carencias, Bonini mantiene una mirada optimista, considerando que estos servicios irán llegando “de a poco” a medida que Marisol continúe su desarrollo. Reiteró que el crecimiento de la localidad es constante, que “no se para”, y que año tras año van surgiendo mejoras en los servicios para la gente.

El delegado

Raúl Bonini lleva cinco años en la función de delegado de Marisol. Se siente “muy cómodo” en su rol, cumpliendo con la función pública que comenzó durante la gestión del ex intendente Raúl Reyes, y que se extiende en la actualidad con la administración de Juan Carlos Chalde, del mismo espacio político, y de quienes resaltó la buena relación y la disposición de ambos para ofrecer soluciones. (Fuente y foto La Voz del Pueblo). (14-06-25)